sábado, 17 de junio de 2017

SHIN - La importancia del Ukemi


 Cuando uno comienza a practicar Judo lo primero que aprende es a caer. Los Ukemi, o caídas, son lo más importante cuando se aprende Judo. Si un judoka no sabe caer se lastima. Por otro lado, si un judoka no sabe caer no puede pretender tirar sin lastimar.

 Para lograr comprender la importancia de los Ukemi en el Judo, a continuación un fragmento de un escrito de Jigoro Kano llamado: “Sobre la importancia del Ukemi”:

“Hoy día ya no se ven técnicas tan claramente ejecutadas como solían verse. Casi todos adoptan una postura rígida y defensiva, mostrándose únicamente preocupados por la idea de ganar el combate sin la más mínima aspiración de lograr la superación personal.

  El Judoka que se propone objetivos altos para el futuro no debe preocuparse por las victorias o derrotas en el presente. El objetivo más importante en el entrenamiento del Judo es desarrollar velocidad y libre movimiento del cuerpo. Si uno entra en una competición con la única idea de no ser derrotado automáticamente el cuerpo se convierte en rígido y defensivo, lo cual es totalmente inconveniente para lograr una acción rápida y efectiva. En cambio, el Judoka que se mentaliza en lograr velocidad y libre movimiento del cuerpo, sin preocuparse realmente en ser derribado, tarde o temprano desarrollará las cualidades deseadas, y será capaz de atacar o defender, según aparezcan las oportunidades.

  Para convertirse en invencible el Judoka no debe confiarse de su propia fuerza, ya que cuando se enfrente a alguien más fuerte seguramente será derrotado.

  Existen muchos métodos defensivos, pero el principal es evadir la fuerza del oponente o cambiar la posición de uno a fin de reducir el efecto de la fuerza aplicada. Otro método es debilitar la fuerza que el oponente intenta aplicar simplemente empujando o atrayendo. Para lograr efectividad en estas acciones defensivas, el Judoka debe adquirir un libre y rápido movimiento del cuerpo.

  Como siempre he dicho, si uno odia ser proyectado nunca puede pretender convertirse en un maestro. Realizando caída tras caída, un Judoka debe aprender a vencer el miedo de ser proyectado. Entonces, así logrará no tener miedo de ser atacado y será capaz de tomar la iniciativa en el ataque. Sólo siguiendo esta forma de entrenar un Judoka puede aprender el verdadero Judo. Kata y Randori, los cuales son maneras de entrenar, deberían ser conducidos en el camino de desarrollar velocidad y libre movimiento del cuerpo.”



sábado, 3 de junio de 2017

GI - Judo olvidado: Ashi-Kansetsu Waza

 Las luxaciones de pierna son un conjunto de técnicas que se aplican a las articulaciones de la rodilla y del tobillo. Sirven, naturalmente, para obtener la rendición del contrario o neutralizarle completamente si se trata de un combate real, ya que una vez conseguido el contacto favorable, su resultado es inmediato.

 Estas técnicas formaron parte del arsenal técnico de las antiguas escuelas de Ju-jutsu y, por supuesto, del Judo Kodokan; aunque posteriormente se prohibieron en Randori y Shiai por cuestiones de seguridad. Mientras en las luxaciones al codo la sensación dolorosa tiene lugar antes de que se produzca la lesión, con cierto margen de seguridad, en el presente grupo de variantes, el mencionado margen es mucho menor. Ello ha impulsado su prohibición en las competiciones. No obstante, es conveniente su estudio como defensa personal y también para tener un programa de entrenamiento de Judo más completo.

 A menudo es difícil conseguir el contacto para estas técnicas. He aquí por qué el papel esencial de las llaves de pierna -como también en las llaves de cuello- consiste, sobre todo, en determinar las reacciones defensivas que pueden ser realizadas, a fin de aplicar estrangulaciones y llaves de brazo. 

 El objetivo de estas técnicas es conseguir un esguince o luxación de la rodilla o tobillo, lo que obliga al contrario al abandono. El esguince es una ruptura de los ligamentos de la articulación; la luxación define un desplazamiento durable de las articulaciones propiamente dichas.