Al terminar un duro entrenamiento en el Dojo, los estudiantes estaban exhaustos y se comenzaban a cuestionar la importancia del entrenamiento para obtener resultados. En aquel momento, cuando el maestro estaba reunido con varios de ellos, les contó la siguiente historia:
"En un Dojo, sobre el Tatami hay tres estudiantes de Judo haciendo Mokuso, pero uno de ellos decide marcharse a la ducha... ¿Quién de vosotros sabe cuántos estudiantes quedan en el Tatami?"
Los estudiantes quedaron estupefactos, ni sabían que decir, ni se atrevían a decir nada. Uno de ellos se adelantó y dijo:
"Es fácil, quedarán dos estudiantes en el Tatami"
Entonces todos los estudiantes asintieron y dijeron juntos:
"Quedarán dos estudiantes, si uno se marcha y eran tres; ahora solo quedarán dos"
A lo que el maestro respondió:
"No es correcto, quedarán tres estudiantes, porque uno apenas decidió marcharse, pero haber decidido marcharse, no quiere decir que lo haya hecho"