Como he subrayado en varias ocasiones, el propósito
del estudio de judo es perfeccionarlo a usted y contribuir a la sociedad. En
comparación con el esfuerzo que otros gastan para ganar fuerza, los
practicantes de jujustu en el pasado dieron relativamente poca importancia a lo
que harían una vez se habían hecho fuertes. Asimismo, los practicantes de judo
de hoy en día no hacen esfuerzos suficientes para lograr los objetivos del judo
y se han hecho exageradamente fuertes o quieren ganar en competición, que son
sólo medios y no fines. Esto no quiere decir que no tenga un valor inherente el
ser fuerte, pero es necesario en primer lugar como un medio para lograr
objetivos más elevados.
Hay muchos jóvenes que se dedican a diferentes
formas de ejercicio, no sólo judo, y que tienen fuertes órganos como resultado,
pero también sufren diversas lesiones y enfermedades. Por otro lado, a veces veo jóvenes que no se ejercitan de
manera regular y pasan su tiempo leyendo o participando en otras actividades
similares pasivas, pero poco sanas. Esto no es necesariamente el resultado
natural de su constitución, sino mas bien que los que se entrenan por el
ejercicio no están realmente teniendo cuidado sobre su salud. Para hacerse
fuerte, ya sea a través de judo u otra forma de ejercicio, sólo tiene valor si
usa la fuerza para la sociedad. Si usted no entiende esto, usted se encontrará
con obstáculos y será incapaz de cumplir lo que se propuso hacer,
independientemente de su fortaleza. Por lo tanto, debe recordar que el
propósito de gastar una gran cantidad de esfuerzo para construir un cuerpo
fuerte es para que pueda realizar los trabajos que de otro modo no podría
superar.
Los que aspiran a alcanzar los niveles bajo y medio
de judo, naturalmente, entrenan sus cuerpos y mentes y por consiguiente, logran
el objetivo del nivel superior de judo. No hay nada mejor para alcanzar el
nivel superior de judo que establecer esto desde el principio. Por lo tanto,
incluso si usted se limita a la práctica del judo para el auto desarrollo y no
con el propósito de convertirse en un experto, siempre debe tener mucho cuidado
en observar cuál es el efecto que su comportamiento tiene sobre la sociedad.
«Logros sociales» como la fama y la riqueza no son indicativos de las
contribuciones valiosas a la sociedad, y deben considerarse con cautela. Hay
quienes contribuyen poco a la sociedad, a pesar de que han alcanzado un alto
estatus social o la fama, así como los que acumulan grandes riquezas, y sin
embargo, no saben cómo utilizar esta riqueza en beneficio de la sociedad. Fama
y estatus no son necesariamente útiles, ni se puede invocar a la riqueza. Lo
que verdaderamente debe ser valorado es cuánto ha contribuido uno a la
sociedad.
Jigoro Kano (1860-1938)
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