Seiryoku zenyo, el principio del Judo, se puede aplicar a todos los aspectos de la vida social. Pero un nuevo problema surge en este punto: ¿cómo puede ser aplicado Seiryoku zenyo cuando dos o más personas forman un grupo?.
Cuando las personas están solas el principio de Seiryoku zenyo se puede aplicar sin problemas, pero cuando hay un grupo de dos o más personas simplemente basta con que una persona actúe egoístamente para que los conflictos surjan con facilidad. Pero si cada parte en un grupo evita actuar egoístamente considerando las necesidades y circunstancias de las demás personas del grupo, entonces naturalmente los conflictos podrán ser evitados y se podrá lograr la armonía. El conflicto va en detrimento de la armonía mutua mientras que la armonía es para el beneficio mutuo.
Por lo tanto, si un grupo de personas vive en conjunto, no sólo pueden evitar ofender a los demás sino que también ellos pueden ayudar a los demás. Hay cosas que no podemos hacer solos, por lo que necesitamos la ayuda de otros. Por otra parte, las virtudes y los puntos fuertes de uno pueden complementar y fomentar los de otro. En consecuencia, la situación para ellos ofrece una serie de ventajas que no tendrían si estuvieran solos. Esto se llama sojo sojou jita kyoei, lo que significa prosperidad mutua a través de las ayudas y concesiones mutuas. Esto se puede reducir a jita kyoei.
Por esta razón, si cada miembro de un grupo actúa desinteresadamente y ayuda a los demás, el grupo puede ser armonioso y actuar como uno solo. En consecuencia, el grupo puede hacer el mejor uso de su energía, al igual que una sola persona. Este principio sigue siendo cierto incluso en el caso de una sociedad compleja con una población de millones de personas. Por lo tanto, si se realizan Seiryoku zenyo y Jita kyoei, la vida social seguirá su progreso y desarrollo naturalmente, y como miembros de la sociedad todo el mundo podrá lograr los resultados esperados.
Jigoro Kano (1860-1938)
No hay comentarios:
Publicar un comentario