En una clase de Judo o cualquier sesión de actividad física que realicemos es importante cumplir con todas las fases para que éste resulte adecuado y beneficioso para nuestra salud, permitiéndonos prevenir lesiones o dolores musculares.
En primer lugar lo correcto es realizar un calentamiento previo para preparar los músculos y el cuerpo para la siguiente fase, el entrenamiento de Judo propiamente dicho. Por último, y no por eso menos importante, se debe realizar un adecuado enfriamiento o vuelta a la calma durante la parte final de dicho entrenamiento.
El enfriamiento se define como el proceso posterior a una actividad física con carácter de esfuerzo que tiene por finalidad restituir al organismo y regresar a los valores metabólicos y neuromusculares que se tenían en la situación inicial de reposo. La vuelta a la calma son los ejercicios realizados para reducir progresivamente la intensidad del esfuerzo.
Es imprescindible la vuelta a la calma progresiva después de cualquier ejercicio, ya que con ella el atleta, deportista o persona ejercitada podrá recuperarse adecuadamente sin sobrecargar su cuerpo a medida que avanza el entrenamiento y así, evitar posibles lesiones o fatigas musculares de gran severidad.
Muchas veces por falta de tiempo, de ganas o simplemente por no poseer el hábito se deja de lado esta fase de recuperación tan valiosa para el organismo. Es fundamental recordar y poner en práctica la etapa de enfriamiento o vuelta a la calma, pues así, nuestro cuerpo descansará en mejores condiciones, sin molestias ni dolores, y podrá volver al día siguiente a la práctica con mayor vitalidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario