"En 1934 entré en la universidad de Busen donde se formaban los profesores no sólo en las Artes Clásicas, si no también en las Artes Marciales, en el Judo en particular y en anatomía, psicología y pedagogía. Era una escuela muy dura. La promoción por año era de veinte personas, pero al terminar el ciclo de cuatro años solamente éramos una decena los que terminamos a causa de las enfermeda- des y de las lesiones.
Entrenábamos durante todo el día y era raro el día que no hacíamos más de mil uchikomis. Respetábamos a nuestros profesores hasta el punto de no caminar jamás sobre su sombra. Estudiábamos en el espíritu del Bushido, para servir y morir por el Japón y la familia. Era el espíritu de Busen, era la época de la guerra, era normal..."
Entrenábamos durante todo el día y era raro el día que no hacíamos más de mil uchikomis. Respetábamos a nuestros profesores hasta el punto de no caminar jamás sobre su sombra. Estudiábamos en el espíritu del Bushido, para servir y morir por el Japón y la familia. Era el espíritu de Busen, era la época de la guerra, era normal..."
"Fuimos a Tokyo en 1937, para combatir con otras universidades en el kodokan y nos encontramos con el maestro Jigoro Kano, un hombre impresionante, un gran filósofo. Los compañeros dijeron de ir a hablarle. Nos dijo:"Vosotros sois los profesionales del Judo, sois vosotros los que tenéis que ir por todo el mundo para enseñar el Judo". Es por lo que cuando el presidente de la federación francesa de Judo, Paul Bonnet-Maury, que estaba en Japón, nos hizo saber que buscaba un instructor de Judo por un año, yo atravesé los mares para difundir el Judo, el espíritu japonés y el Bushido. Y así yo he permanecido cuarenta y nueve años lejos del Japón..."
"El Judo es Shin-Gi-Tai, donde uno se compromete totalmente en el trabajo de la técnica y es así como el cuerpo se desarrolla y el espíritu se consolida. El espíritu del Judo es la sinceridad sin desvío, el compromiso, el espíritu de decisión. Es también el ataque al máximo. Defenderse es no ganar jamás..."
"Donde yo he aprendido no se nos mostraba lo que era necesario hacer. Eramos nosotros los que debíamos buscarlo ante el sensei. Sí lo que hacíamos no le gustaba, él se marchaba sin decirnos nada. En Francia esto no sería posible. La gente diría simplemente“está loco...”
“En Francia, cuando se enseña una técnica, algunos dicen rápidamente "ya la conozco". Es importante no conocer, porque en tanto no se conoce siempre se puede trabajar y siempre se aprende hasta que uno no ha muerto, es todavía tiempo de estudio. Hoy día, si mi rodilla no estuviese gravemente lesionada, yo trataría aún de hacer Randori, caer no es importante...”
“Los Judokas deben ayudarse, es el principio del Judo. Si yo estoy a gusto con un compañero, él estará a gusto conmigo, de otra manera ni uno ni otro, ni nadie progresará. Pienso que es una buena manera de ver el mundo, pero yo no sé hacer política...”
“El Judo es educación. Jigoro Kano le dijo a Pierre de Couvertin que quería que el Judo llegara a ser un deporte, “El Judo es competición, pero es también otra cosa”. Hoy se ha olvidado esto. Se gana por la fuerza en lugar de buscar acción-reacción. Se puede incluso ganar una competición con un movimiento mal hecho y esto no es normal. Al principio del Judo incluso con un waza-ari en contra se podía hacer combate nulo. Pienso que el Judo ha bajado, también en el Japón...”
“La igualdad y la fraternidad están muy bien. La libertad también, pero yo prefiero la responsabilidad. La libertad no es más que el salvajismo sin disciplina y así la sociedad no puede funcionar. El alumno saluda al maestro y el maestro saluda al alumno, así se aprende. Cuando el maíz es joven crece derecho y pincha, pero cuando está maduro se inclina. Se aprende a respetar a los demás envejeciendo...”
“La manera de enseñar demostrando y hablando no es suficiente. Los pianistas repiten y repiten constantemente. El Judo es mucho más difícil que el piano. Es necesario estudiar y repetir mucho más, porque esta disciplina pide constantementa más coraje y mayor esfuerzo. Después de esto se está preparado para ayudar a los demás, a la sociedad...”
Haku Michigami (1912-2002)
This photo was taken in Essex, England in 1980.
ResponderEliminarBordeaux, France 1978
ResponderEliminarThank you very much.
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